Hay muchos cultivadores que están en contra de podar sus plantas, pero si te comprometes a realizar bien esta tarea, tus plantas se verán beneficiadas. Así que tienes que asegurarte de hacerlo bien. Hemos armado una lista de 6 consejos sobre podar tus plantas de marihuana para que le puedas sacar el mayor provecho a tu jardín.
Podar algunas veces es visto como un fastidio cuando se habla de cultivar marihuana, pero es asombroso cómo realizar unos ligeros cambios puede afectar el producto final. Básicamente, podar es una de esas cosas por las que te agradecerás después de hacerlo, y en realidad puede ayudarte a incrementar tu producción. En el caso donde los espacios de cultivo se están saliendo de control, podar también puede ayudarte a controlar la situación.
Podar tu planta de cannabis es básicamente una forma de redistribuir las hormonas naturalmente cuando tus plantas están creciendo, para que así puedas maximizar su producción y desempeño. ¡Así que aquí te traemos algunos consejos para que podes de una forma que aliente a tu planta a tener la producción más abundante posible!
1. No estreses mucho tus plantas al podarlas excesivamente
Te sorprendería cuánto tiempo de recuperación necesitan tus plantas después de podarlas. Si las estresas mucho, ellas no van a responder positivamente, así que se delicado con ellas. Nunca remuevas más del 20-30 por ciento del follaje al recortar, ni tampoco recortes muchas ramas al mismo tiempo.
2. Deshazte de las ramas inferiores lo más rápido posible
Las ramas interiores de tu planta de marihuana no reciben mucha luz, lo cual no significa mucho al principio, pero a largo plazo afecta su crecimiento. Las ramas inferiores realmente no producen muchas colas, así que no pierdes mucho al podarlas y recortar sus hojas. Tu planta será capaz de enfocarse mejor en enviar glucosa a otros lugares para producir cogollos más grandes.
3. ¡Recorta la rama superior de tus plantas!
Debes recortar la rama superior de tus plantas, la cual aparentemente sería la parte más frondosa de las plantas. Sin embargo, esta cola restringe el crecimiento del resto de tu planta de marihuana, y cortarla puede alentar al crecimiento de la planta en varias partes de su cuerpo. Eso al final significa una producción más abundante.
4. Deshazte de las hojas muertas
Mientras tu planta de marihuana va creciendo, descubrirás que algunas de las hojas alrededor de la parte inferior de la planta han comenzado a ponerse amarillas o inclusive han comenzado a morir. En realidad es mejor podar estas hojas antes de que se pongan amarillas y mueran. Recortar estas hojas significará que la planta no gastará energía allí, e irá a donde realmente sea necesaria.
5. Espera antes de la floración
Después de que hayas recortado la rama superior de tu planta, espera algunos días para que se adapte a su nuevo corte de cabello antes de la floración. En este momento, la parte inferior de la planta comenzará a disfrutar del banquete dejado por la cola superior, y comenzará a pronunciarse hacia arriba. Cuando esto comienza a ocurrir, es hora de forzar la etapa de floración.
6. Dalo por terminado
Una vez que tu planta haya entrado en la etapa de floración, puedes guardar tus tijeras. Generalmente no es buena idea podar durante esta etapa porque el daño que realices es probable que cause un trauma irreversible. Si realmente tienes que hacerlo, puedes recortar cualquier hoja muerta al fondo de tu planta mientras está floreciendo, pero no hagas nada demasiado drástico.
Lo mejor que puedes hacer cuando se habla de podar, es siempre ser cuidadoso. Cada vez que podes, le estás causando un trauma a la planta. Cuando lo haces de la forma correcta, la planta responderá exactamente como tú quieras que lo haga, pero si le das un tratamiento a lo Edward Manos de Tijeras, ellas no estarán felices al respecto. ¡Recorta cuidadosamente!