Cultivar marihuana no es tan fácil como hacer una taza de té, pero tampoco debería ser como explicar la teoría de la relatividad. Parece haber algunos errores comunes entre aquellos que son (relativamente nuevos) a cultivar cannabis. ¡Si piensas que sabes cómo cultivar marihuana, asegúrate de leer este artículo para evitar errores de principiantes!
Yo recuerdo la primera vez que estaba cultivando marihuana. De repente, se abrió un mundo lleno de posibilidades. Bien, principalmente la posibilidad de que mis amigos y yo fumaríamos gratis. Es emocionante hasta el momento que te das cuenta que no tienes idea de cómo cultivar marihuana.
Gracias al Internet, que es casi la mejor universidad del mundo, no hay una necesidad real de saber cómo cultivar marihuana. ¿Eventualmente lo aprenderás, cierto? Claro – pero no sin cometer algunos errores primero.
La cosa sobre cultivar marihuana es que nunca será perfecto la primera vez. Los mejores cultivadores del mundo se volvieron los mejores al hacerlo una y otra vez, corrigiendo sus errores y haciendo todos los ajustes necesarios para perfeccionarlo. No quiero decir que cultivar cannabis es similar a la física cuántica, porque definitivamente no es así.
Pero hemos notado que hay algunos errores que los cultivadores primerizos tienden a cometer. Y gracias al Internet, te has topado con este artículo, así que puedes ser uno de esos cultivadores primerizos que realiza los 10 errores más comunes cometidos por cultivadores novatos.
1. Olvidar prepararse
Así que decidiste comprar impulsivamente algunas semillas de buena calidad y ahora piensas que estás listo para comenzar a cultivar. Ese es un error de novato. ¡Cultivar marihuana es un proyecto botánico hecho y derecho! Uno ni siquiera debería cultivar vegetales si no se está preparado. Aun así este es uno de los errores más comunes de los cultivadores novatos.
Cultivar marihuana significa prepararse de antemano. Tú necesitas preparar el entorno, así vaya a ser en espacios interiores o al aire libre. ¿Qué nutrientes vas a necesitar y en qué cantidades? ¿Tienes dispositivos de iluminación? ¿Tienes una buena tierra para jardinería? ¿Cómo planeas lidiar con las pestes? – ¡Esperamos que sin pesticidas!
Como puedes ver, hay algunas cosas que debes pensar antes de saltar directo a la cultivación. Tener una idea de lo que necesitas antes de comenzar evita que tengas que correr de un lado a otro todos los días consiguiendo los artículos que necesitas para no arruinar tu cultivo.
2. Comenzar con una mala semilla
Si estás pensando en comenzar tu imperio del cannabis con una semilla que encontraste entre algunos cogollos que fumaste recientemente en tu círculo de fumadores, te vas a decepcionar. Todos los cultivadores exitosos van a comenzar con la misma cosa: una semilla de buena calidad.
Es fácil que los cultivadores primerizos piensen que todas las semillas de cannabis son creadas igual. Sale una planta de marihuana de todas ellas, ¿correcto? ¡No! Cualquier cultivador experimentado sabe que las genéticas hacen una gran diferencia al final del día. ¡Comienza con una buena semilla de WeedSeedShop!
Algunas cepas que recomendamos para los principiantes son:
- Northern Lights Automática: No te puedes equivocar con esta cepa clásica de florecimiento automático
- Master Kush: Esta cepa es muy resistente y no morirá inmediatamente cuando cometes un error pequeño de novato.
- Top 44: Esta es resistente, y además de eso crece increíblemente rápido: El 44 representa 44 días, ¡lo que significa que puede florecer en un poco más de 6 semanas!
3. Contárselo a todo el mundo
¡Una de las reglas principales de un cultivo exitoso es no contárselo a nadie! Y claro, es algo que los cultivadores principiantes a menudo pasan por alto. Es extremadamente tentador alardear con todos tus amigos sobre el potencial de fumar marihuana gratuita. Pero no te dejes llevar ni comiences a publicar imágenes de tu jardín en Facebook o Twitter. Las personas que lo sepan pueden llegar a ser tu obstáculo más grande.
Nosotros definitivamente no estamos apoyando aquí las operaciones de cultivo ilegales. Pero inclusive en lugares donde cultivar marihuana es legal, puede seguir habiendo algún tipo de estigma asociado con ella. Así que para evitar la intervención de los vecinos que rechazan lo que hacemos, guárdalo solo para ti.
No tiene nada de malo mantener oculto tu espacio de cultivo, ¡lo cual significa sellar tus labios al respecto y mantener el olor bajo control!
4. Utilizar el tipo de tierra incorrecta
Otro error común de los principiantes es elegir el tipo de tierra o mezcla incorrecta para el cannabis. Recuerda, el cannabis necesita nutrientes diferentes a los de las plantas regulares, lo cual significa que necesita un diferente tipo de tierra. Muchos tipos de tierras disponibles en tus tiendas de jardinería local simplemente no serán suficiente.
La tierra necesita tener el pH correcto, y tiene que tener los nutrientes correctos en ella. El radio de nitrógeno, potasio y fósforo en el suelo es extremadamente importante para que tu planta de cannabis florezca. ¡Asegúrate de elegir un tipo de tierra que sea apropiada para cultivar marihuana!
5. Olvidar controlar el pH
Los nuevos cultivadores están ocupados dándole nutrientes, recortando, rociando y contando centímetros de crecimiento de sus plantas – pero claro, ellos se han olvidado completamente sobre el pH. Si el pH de la tierra se sale completamente de control, puedes arriesgarte a perder tus plantas si es que no compromete seriamente toda tu cosecha.
¡Está atento del pH! En realidad, adquirir una herramienta para medir el pH de tu suelo es algo que deberías haber hecho durante la etapa de preparación. Asegúrate de tener también una solución para regular el pH, solo por si acaso tu tierra se pone demasiado ácida o alcalina.
6. Dejar que las plantas mezclen sus raíces
Si estás cultivando tus plantas de marihuana en macetas o contenedores, es importante “mejorar” periódicamente el contenedor donde está. Para una plántula, tiene sentido cultivarla en una maceta pequeña. Pero lo que ocurre después de un momento es que las raíces crecen hacia afuera de la maceta. Después de eso, no hay otro lugar a donde ir, así que el crecimiento de la planta se ve paralizado.
No cometas este error, y compra todas las macetas que necesitas antes de comenzar a cultivar. Periódicamente (y cuidadosamente) trasplanta tus plantas a macetas o contenedores más grandes para darles a las raíces más espacio para crecer. Una vez que salen de la etapa de vegetación las raíces no crecerán tanto, así que no habrá necesidad de cambiar la maceta.
7. Riego excesivo
Es difícil creer que puedes regar excesivamente una planta de marihuana. El agua es buena para ellas, ¿no? Bien, sí, excepto que igual que los humanos, si los ahogas, los puedes matar. Este es otro error común entre cultivadores principiantes.
Los cultivadores primerizos normalmente no riegan excesivamente al echar demasiada agua, sino al echársela muy frecuentemente. Tú sabrás cuando tus plantas están sedientas al meter tu dedo en los primeros tres centímetros de la tierra. Si está seca, tu planta está sedienta. ¡Si sigue húmeda, no tienes que regarla!
8. Sobrealimentar tus plantas
Este error está unido al anterior. Los cultivadores primerizos algunas veces creen que entre más nutrientes les den a sus plantas, es más probable que florezcan y crezcan mejor. ¡Ups!
Piensa sobre tus plantas como seres humanos. Tú simplemente no seguirías alimentando una y otra vez a tu hijo, ¿cierto? Ellos probablemente podrían desarrollar problemas de colesterol, diabetes, obesidad y mucho más. No puedes darle obesidad a tus plantas como algunos cultivadores quisieran hacerlo (¡entre más grandes los cogollos, mejor!) ¡Pero puedes darles quema de nutrientes!
Cuando las plantas reciben demasiados alimentos (en forma de nutrientes), pueden perjudicarse. Comienza dándoles a tus plantas un cuarto de lo instruido según las instrucciones del producto que hayas comprado. Si tienen una deficiencia de nutrientes, lentamente aumenta la dosis de los nutrientes.
9. Recortado excesivo
Relájate con los recortes si estás cultivando por primera vez. Realmente no hay necesidad de hacer una obra de arte con tus tijeras así como lo harías con un cincel. Cuando se habla de los recortes, entre menos, mejor. Sí, recortar puede provocar más crecimiento, pero si lo haces demasiado, puedes perturbar tus plantas completamente.
Se moderado con los recortes y observa cómo tus plantas responden ante ello. Deja que tus plantas te digan si es muy poco, demasiado o la cantidad correcta.
10. Cosechar demasiado pronto
Ahh… cuando se acerca ese momento donde esos cogollos comienzan a lucir tan exquisitos que tú solo quieres… ¡cortarlos tan rápido como sea posible! Lo triste es que tú sabrás que habrás hecho esto una vez que los fumes y te des cuenta que no están tan potentes como su olor. Bien, la mayoría de la producción de los tricomas se realiza en las etapas finales del crecimiento. ¡Así que no saques esas tijeras demasiado pronto!
Utiliza una lupa para echarle un vistazo a los tricomas. Si todavía lucen claros o transparentes, entonces no han alcanzado su potencial completo. Cuando la mayoría de ellos tienen un color opaco y la mayoría de los vellos en la planta se han vuelvo oscuros, casi habrán alcanzado su potencial completo.
Realmente hay un momento perfecto para cosechar, lo cual puede tomarte un largo tiempo dominarlo. ¡Pero no te emociones demasiado como para terminar cortando tus plantas prematuramente!
Una vez que hayas superado los errores de los cultivadores “novatos”, comenzarás a encontrarte con los errores “avanzados” – ¡te lo prometemos! En cada paso de la aventura de cultivar marihuana, habrá algunas cosas que debes aprender mientras realizas algunos errores.
Después de que hayas dominado los métodos básicos de cultivo, es posible que quieras avanzar hacia los hidropónicos, la cultivación vertical y un jardín orgánico de cannabis. Todo cultivador enfrenta desafíos en cada paso del camino – ¡eso es lo que hace que cultivar marihuana sea divertido y atractivo!