Muchos de los beneficios sutiles de la salud proporcionados por la marihuana pueden ser experimentados al solo consumir un poco. La idea detrás de las microdosis es que inclusive la cantidad más pequeña es suficiente para hacerte sentir más energético o productivo. Sigue leyendo esta guía sobre cómo consumir microdosis de marihuana.
¿Drogarse o no hacerlo? Esa es la pregunta que surge cuando se habla de las microdosis. Este método de uso se ha vuelto cada vez más popular entre psiconautas en años recientes, y ahora está filtrándose hacia el consumo de la marihuana. La microdosis de marihuana ha estado ganando más y más impulso desde una famosa publicación sobre la microdosis de LSD: “A Really Good Day” by Ayelet Waldman.
Bien, ¿cuál es la mejor forma de consumir marihuana? Si quieres drogarte, entonces la microdosis probablemente no es la mejor opción para ti; sino para aquellos que están más interesados en observar los efectos más sutiles de la marihuana. ¡Este artículo se trata sobre por qué querrías consumir microdosis y cómo hacerlo!
¿Qué es la microdosis?
Como el nombre podría sugerirlo, la microdosis significa tomar dosis muy pequeñas de algo, pero haciéndolo muy frecuentemente. Es una forma de evitar los efectos abrumadores y psicodélicos de la planta, mientras eres capaz de aprovechar los efectos más delicados y menos intrusivos.
Este método de administrar drogas fue primera vez usado por científicos que querían inducir la respuesta celular a ciertos químicos sin producir “todo” el efecto. Este es esencialmente el principio detrás de las microdosis, es decir, que los efectos se sientan a nivel celular, lo cual es suficiente para mejorar la experiencia de vida.
¿Por qué probar la microdosis?
¿Pero por qué querrías evitar el efecto psicoactivo? Bien, en realidad puedes beneficiarte mucho más si abandonas la gratificación instantánea de fumar una dosis apropiada o comer todo un brownie. La microdosis es como extraer las partes del efecto psicoactivo que te encantan para que puedan durar por un periodo de tiempo más largo a niveles más sutiles. La idea es que abandonar el efecto mental de la marihuana permite beneficiarte con cosas que duran mucho más tiempo.
Interesantemente, la microdosis comenzó en laboratorios donde los científicos estaban probando la influencia de ciertos químicos en los humanos, pero no querían abrumar a los sujetos de estudio con los efectos. Esto se debe a que ya había sido observado que inclusive administrando una cantidad diminuta, la reacción celular aun así se llevaba a cabo. Por la mayor parte, la homeopatía yace en este principio. Así que, nosotros sabemos que inclusive la influencia externa más sutil alentará a que se desarrolle todo el proceso.
Con dosis muy pequeñas de THC, puedes mejorar tu enfoque y atención, e igualmente puedes provocar una sensación de relajación más profunda. Estas son las cosas que podrías experimentar en ráfagas cortas de tiempo cuando fumas o comes hasta quedar completamente drogado. Sin embargo, a través de las microdosis, estas sensaciones pueden comenzar a expandirse más sutilmente en más aspectos de tu vida. Puede haber una influencia natural hacia una vida más saludable y sostenible.
Aunque la idea de la microdosis recientemente se ha vuelto más popular, las personas han estado haciéndolo desde hace mucho tiempo. Aldous Huxley admitió haber usado microdosis de LSD en los años 60s. La investigación moderna sobre la microdosis está siendo realizada por James Fadiman, quien está administrando dosis de psilocibina y LSD tan pequeñas que son básicamente imperceptibles.
Las personas están utilizando microdosis como una forma de lidiar con todo tipo de males – así sea ansiedad, TDAH o inclusive un simple bloqueo creativo. Los testimonios generales sugieren que la microdosis es efectiva, quizás más efectiva que una dosis completa.
Por último, la microdosis también te da la oportunidad de utilizar la marihuana como una parte de tu rutina diaria. Sin el efecto psicoactivo, eres mejor capaz de seguir con tu rutina diaria con la marihuana como un pequeño ayudante en tu bolsillo, en vez de algo que potencialmente no dejará que te muevas del sofá.
Cómo hacerlo
Obviamente, todo se trata sobre el tamaño de la dosis. Podría tomarte un tiempo perfeccionarlo, porque naturalmente va a variar de individuo a individuo. Para empezar, deberíamos hablar sobre cuál método de administración vas a usar. Es difícil medir la dosis de THC cuando estás fumando, y por esa razón, los porros y bongs generalmente no son recomendados. Los comestibles o tinturas por otro lado, te dan la oportunidad de controlar la cantidad de THC. Asegúrate de estar consciente del contenido de THC de la cepa que estás utilizando, y entonces divide las cantidades apropiadamente. Lo mismo aplica para las tinturas.
Vaporizar también es un método de ingestión apropiado si vas a comenzar a consumir microdosis. Es una de las formas más fáciles de sacarle el mayor provecho a tu marihuana, así que si sabes cuál es el contenido de THC de tu cepa, básicamente puedes disfrutar garantizadamente de todo su contenido si lo vaporizas. Llenar tu vaporizador con la cantidad suficiente para inhalar solo una vez es la mejor opción, porque no te arriesgas a poner demasiada marihuana dentro de tu vaporizador.
Entonces, ¿qué sería considerada una microdosis? La mayoría de las cepas de marihuana tienen alrededor de 25% de THC. Eso significa que un gramo de marihuana fuerte contiene alrededor de 250 miligramos de THC. Tú deseas encontrar una que se sitúe más o menos en 10%. Como mencionamos, va a variar de individuo a individuo, y al pasar del tiempo, podrías continuar disminuyendo la dosis. Deseas estar en algún lugar entre completamente sobrio y un poco drogado, sin cruzar la línea de estar drogado.
Hay compañías, como Kiva, que están fabricando productos en EE.UU específicamente para el propósito de las microdosis. Estas dosis de THC son confeccionadas en mentas o chocolates pequeños que le dan a la persona el control completo sobre su dosis exacta. No es completamente necesario comprar estos productos, debido a que puedes hacer tus propios comestibles o chocolates, siempre y cuando sepas el contenido de THC de la marihuana que estés utilizando.
Tú puedes consumir microdosis todos los días
Nosotros estamos acostumbrados a que nos digan que consumir una substancia intoxicante todos los días es malo para nosotros. Sin embargo, en el caso de las microdosis, no se lleva a cabo una intoxicación real. Entre más comprometido estés con mantener una microdosis (en vez de una macrodosis), más abierto estarás al mejor resultado posible.
Cuando encuentres la cantidad perfecta, deberías ser capaz de consumirla todos los días sin sentir un efecto muy fuerte. No hay una forma peligrosa de hacer esto, debido a que es básicamente imposible tener una sobredosis de marihuana, y mucho menos al nivel de las microdosis. ¡Solo asegúrate de no consumir de más! ¡Disfruta cómo la magia del THC puede revelarse a través de las microdosis!